Quien dirigió el partido del año entre Novak Djokovic y Roger Federer en Wimbledon fue echado por haber concedido entrevistas sin el consentimiento de la entidad.
Cuando estaba transcurriendo con normalidad y con un alto nivel de tenis la primera jornada del US Open, saltó un verdadero bombazo periodístico con la confirmación de la destitución del árbitro argentino Damián Steiner por haber dado distintas entrevistas a varios medios después de haber dirigido el pasado domingo 14 de julio la histórica final entre Novak Djokovic y Roger Federer en Wimbledon, según informó el periodista Christopher Clarey en el New York Times.
Steiner, de 44 años y director del departamento argentino de arbitraje, había confesado en aquellos reportajes su felicidad por haber podido vivir en primera persona la última definición de Grand Slam que finalizó con triunfo del serbio por 13-12 en el quinto y decisivo set. “Era una oportunidad que venía esperando. Ese tipo de partidos son únicos y no quería que se terminara para poder seguir viviéndolo”, relató en esa ocasión ante el programa ESPN Redes.
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Clarey señaló que Steiner, quien es un profesional con insignia de oro –lo que significa que está en el más alto nivel del arbitraje- fue despedido once días atrás justo antes de llegar a Flushing Meadows para dirigir en el Abierto de los Estados Unidos, torneo en el que todos desean estar al principio de la temporada.
Una de las principales razones por las que la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP) tomó la decisión de la rescisión de su contrato se debe al número de entrevistas que otorgó (más de diez) y por el contenido de las mismas en las que había sugerido que debían realizarse ciertos cambios en las reglas del deporte.
Tomado de http://www.puntodebreak.com